La noche que marco mi vida para siempre

Todas las mujeres soñamos con “La primera vez “, queremos que ese día sea el más especial de nuestras vidas y que sea con nuestro príncipe azul.   Queremos recordar esa experiencia como algo maravilloso y algo que nunca olvidaremos pero que pasa si tu primera vez no fue lo que tú esperabas? Y peor aun si descubres que el hombre en el cual tanto confiabas no te ama como tú crees?

Les contare la experiencia de una amiga, es una historia triste, pero no creo que sea la única mujer que haya pasado por esto. Los hombres a veces nos decepcionan y no son lo que nosotras creemos.


esta es mi historia :

Una noche de verano, salí a divertirme con mis amigas como cualquier día común y corriente. A decir verdad, me había pasado un poco de tragos, pero ahí estaba divirtiéndome como loca en una de esas discotecas nocturnas.  A eso de las 5 de la mañana, todas mis amigas se fueron, pero yo no quería irme. Justo vino un amigo y me dijo para seguir la ‘juerga’ en su casa con él y más personas, yo en el estado que estaba no pude razonar muy bien y acepte ir con ellos. Una de los chicos que fue con nosotros era mi amor platónico, un amor imposible para mí, yo estaba segura que nunca me iba a hacer caso. Me sorprendí mucho cuando vino a conversar conmigo, me dijo para servirnos un trago y de ahí no me acuerdo muy bien pero terminé teniendo relaciones con él.

 Al día siguiente me levante con un gran cargo de conciencia, no podía creer lo que había hecho, pero de alguna manera me sentía feliz, tenía la ilusión de que lo que paso sea tan importante para él como para mí lo fue. Pocos días después, lo vi en la universidad y le dije para conversar de lo que paso, me dolió mucho cuando me dijo que me olvide de esa noche y que para él solo fue una aventura mas, que yo sería la última persona de la que él se enamoraría.  Ese fue el peor día de mi vida, no sé cómo pude ser tan tonta e ilusionarme, pero bueno ya no hay vuelta atrás, espero que mi historia  pueda ayudar a alguien a no cometer los mismos errores que yo.