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viernes, 6 de mayo de 2011

Como matarme sin morir en el intento.


Puede que creas que porque volví a la universidad y porque escribo ya estoy fuera de peligro. Pero aun no lo sé. Tengo miedo. No hace mucho que salí del hospital y siento que las ideas vuelven a mi cabeza otra vez como un monstruo que soy yo misma y me aterra porque de mi no puedo escaparme.

Recuerdo que ese día fue horrible me desperté tarde para la u, después de todo como iba a saber que era de día si en esta ciudad en invierno nunca hay sol. No me tomé la molestia de correr siquiera, con tal, ya para entonces todo me venía dando lo mismo. Esta enfermedad de la indiferencia me tenía hecha un autómata hacía semanas, a tal punto que ya ni eso me importaba. Llegué tarde a clase y el profesor hizo un despectivo comentario sobre mi, se rieron todos, fingí que no me afectaba, pero lo hizo. No necesito más rechazo en mi vida.

El resto de la mañana pasó igual, horrible, sola, y monocromática como siempre, como siempre es Lima cuando son mis ojos los que la contemplan. Ha sido así desde que me cansé de conformarme con el superficial de mi ex, Fernando. Ese idiota que me arruinó la vida con sus complejos y prejuicios de la gente. Lo dejé pero la huella que dejó en mi me acosa aun. Ese día me sentía tan sola que hasta creí que lo extrañaba, creí incluso que por lo menos él me hubiera hecho creer que alguien me quería.

Llegué a mi casa necesitando que alguien me dijera esa mentira piadosa cuando encontré a mis papas discutiendo. Eso sucede con frecuencia pero nunca como ese día. Estaban furiosos y al verme se abalanzaron sobre mi. Mi papá me cogió fuerte del brazo y comenzó zarandearme, mientras sus palabras se hacían sordas en mis oídos. Yo no entendía que sucedía, no comprendía por qué estaba ahi gritandome, solo veía a mi madre llorar desconsolada sin entender por qué. De pronto reparé en la mano de mi padre y vi aterrorizada el sobre que usualmente escondía tras el aparador de mi cuarto; el sobre en el que guardaba mi pasta.

Él no sabe lo que es tener días largos y negros como inviernos que no terminan nunca. Él no entiende lo que se siente estar tan sola. Él no entiende cuento tuve que pasar desde que dejé a Fernando y me cayó el mundo en cima. ¿Cuántas veces recurrí a experimentar la felicidad así? Aunque fuera por un minuto le daba dopamina a mi vida y me salvaba del abismo. Pero esta vez sentía que tocaba fondo, tenía que salir rápido de esa horrible escena, salí corriendo. Huí lo más rápido que pude y me encerré en mi cuarto.

Saqué el cuchillo que guardaba en el segundo cajón de mi mesa de noche- por si a caso. Oí a mi padre amenazar, maldecir y y patear tras mi puerta, pero finjí no escuchar. Salté sobre el alféizer de mi ventana. Así con los pies desnudos sintiendo el frío sobre el vacío y la luna sobre mi cabeza no quise pensarlo más. Estaba harta ya de toda esta basura y decidí ponerle fin a todo esto. Era la primera vez que sentía la convicción de querer hacerlo. Por fin. Agarré el cuchillo por el mango y lo sujeté con fuerza mientras lo clavaba sobre mi brazo izquierdo. Primero suavemente, como si fuera seducida por el filo del frío metal sobre mi piel, y luego , sin pensarlo, lo clave lo mas profundo que pude y lo rasgué hacia abajo.

La sangre corrió sobre mi jean, mi brazo y la pared. Sentí paz. Era la primera vez que me sentía en ese trance seductor de tener el control. Sentí que me desvanecía y sentí un poco de miedo, pero conforme iba saliendo la sangre me abandoné a la extraña sensación de placer que me recorrió el cuerpo. La primera vez y la ultima, me fascinaba la idea. Sumergida en mis pensamientos sentí que me perdía y así fue. Ya para cuando abrí los ojos de nuevo estaba rodeada de aparatos, de gente y me dirigía al hospital.

11 comentarios:

  1. Alaaaaaa eres un EMO! Te AMO alucinaaa

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  2. Flacaaaaa eres mi DIOSAA!!! Que INTENSAAAA me quedé demasiaaado pegada con tu historia. Escribes demasiado bien!!!

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  3. De pronto reparé en la mano de mi padre y vi aterrorizada el sobre que usualmente escondía tras el aparador de mi cuarto; el sobre en el que guardaba mi pasta
    soy tu admirador secreto

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  4. de la cabeza mal te recomiendo que pases por mi blog y aprende a jugar en la vida

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  5. como lo puedo hacer? no quiero fallar, no quiero llegar al hospital y despues contar la historia a personas desconocidas por internet

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  6. Hola, sera mi primera vez y no quiero fallar, diganme como lo puedo hacer

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  7. Ahora vamos a escribir sobre como llegar lo más profundo de tu sucia vagina.

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  8. Eso... me sorprendio... kiero tener el suficiente valor para acabar con mi vida... pero lamentablemente soy una cobarde...

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  9. Eso... me sorprendio... kiero tener el suficiente valor para acabar con mi vida... pero lamentablemente soy una cobarde...

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  10. Wow me sorprendtés con tu historia

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  11. Wow me sorprendtés con tu historia

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